22 feb 2008

La luna acompañaba la escena

La luna acompañaba la escena.-
La luna acompañaba la escena
de la noche más fría
de este invierno .
El gran toro
Vino
a custodiar
a su amada,
a su luna.
a mi…
Me cubrían
mis ropas
Y mi buena amiga:
Soledad.
Miraba
asombrado
al gran toro,
inmune al frío,
a las montañas,
a mi soledad,
a mí.

Él solo miraba
su luna,
apreciaba su belleza,
también la odiaba,
odiaba su lejanía .

Caminé un poco
ante el gran ventanal
Y ví
como el toro miraba
que alguien más la veía
que alguien más la quería.
Fue a su encuentro
a decir de
sus celos.
Era largo
y ancho
el otro,
de piel oscura,
cargaba una
gran batola
Y una guitarra .



El gran toro
enfurecido
le respiró
con fuerza
en la cara
A ver si
reaccionaba ante su presencia,
Pero él seguía
mirándola,
mirando a su luna.
El toro enfureció
más
y lo pateó
Él seguía mirándola
mirando a la luna,
se repitieron las patadas
varias a veces ,
Y el toro
vio
Que el Hombre
no respiraba,
Su luna
lo había matado
lo había matado
de amor .
Corina Durán

Amor, nubes y fruta por Michelle Guillén

El sol salió más temprano de lo usual esa mañana. Sus rayos recuerdan la sonrisa, y transmiten la misma calidez que produce el abrazo de la persona amada. Las nubes que se observan a lo alto, semejan una gran ensalada dulce, formada por guayabas y fresas, a las mejillas de una tímida doncella enamorada.
En mitad del día, las nubes se tornan como los ojos del melancólico; que sufre o ha sufrido de penas de amor: grises y húmedos , lloran por el sabor amargo de la fruta del rechazo, la cuál varía según el paladar de cada quién.
Llega la tarde, y las nubes yacen calmadas y listas para recorrer esa inmensa extensión celeste a paso lento. Se ven suaves y reconfortantes, como una cama de algodón, en la que se saborea el fruto de la alegría y el deleite, independiente de cual sea este.
Finalmente, llega el tan esperado ocaso, portero de la noche. El que dos personas se disponen a observar, una al lado de la otra, necesitando la presencia de alguna sacudida, como el cítrico al ser probado; para comprobar que todo aquello no fue un sueño. Y como si el cielo leyera sus mentes, el atardecer tuvo color de mandarina en las nubes.
MICHELLE GUILLÉN PÉREZ.

18 feb 2008

Amar la literatura (Ponencia de Corina y Julia)

Son contados los jóvenes de hoy en día que nos interesamos por la literatura. En la actualidad la mayoría de los jóvenes hacen lo que esta de moda y se dejan llevar por lo que hacen y dicen los demás. ¿Será que debemos convertir la literatura en una moda para que a los jóvenes les llame la atención?
La literatura es una ventana que nos permite ver y sentir experiencias ajenas y de igual manera nos deja expresar nuestras vivencias, pensamientos y sentimientos, es “la palabra vivida” “o el sentir de la palabra”. La poeta norteamericana Denise Levertov escribió: “Picasso dijo “Dibujar es cerrar los ojos y cantar”, escribir poemas es seguramente un proceso análogo: escribir es escuchar”.
Es decir, tenemos que cerrar los ojos, dejarnos llevar, recordar, escuchar, pintar, crear, llorar; así llenarnos de vivencias, de situaciones tanto ajenas como propias; porque simplemente la vida cabe en la literatura; en un poema cabe la risa, el llanto, la felicidad y cientos de emociones mas que forman parte de eso, la vida
. La poesía es persuasiva, no explica, no da porqués, simplemente sugiere y deja que el lector vuelva e interpretar en su lectura, a su manera, según sus vivencias. Para ver el punto de vista del escritor hay qué saber de qué está hablando. A través del poema obtenemos cierta información de lo que pasa en el alma de quien escribe y nos comunicamos con su modo de ver, ya que la literatura abarca la vida completa. Uno tiene que escuchar para poder escribir y para poder entender.Para poder escribir, hacer un poema, un cuento o una historia; debe existir una vivencia o experiencia que motive un trabajo. Se debe sentir lo que se escribe para que aquello que se esta construyendo sea bueno y transmita el mismo sentimiento con el que fue escrito. Pero hay que aprender lenguaje, aprender la síntesis que es la poesía.
Una buena obra hace que el lector viva todas las sensaciones que motivaron al autor a escribir la misma, haciendo una conexión escritor-lector en la cual todos los sentimientos afloren.
Se entiende por conciencia social el sentimiento que tengamos con respecto a la sociedad; que tan concientes somos de lo que pasa a nuestro alrededor, y hasta que punto estamos inmersos en ello. Hay sectores de la población del mundo con “pereza mental”, carencia de actitudes críticas y un total desinterés y apatía hacia la realidad vivida por los otros. Nos encontramos dentro de un siglo XXI que debería amar más la literatura, amar más al arte. El rechazo se crea en las mismas aulas de clases al no tomar en cuenta las peticiones de los jóvenes a la hora de hacer una lectura, el desinterés que tenga el profesor de castellano al no impartir con pasión su materia. También esta el conflicto que se ha creado con la tecnología que ha medida que avanza va siendo mas el centro de atención, la tecnología debería estar al servicio del arte.
Esto a su vez desencadena un nuevo conflicto existente entre la literatura y los medios de comunicación, debido a que los mismos no se enfocan de una manera objetiva y con frecuencia nos quieren mantener al margen de los problemas sociales, políticos y culturales existentes al nivel mundial.
La literatura es algo a lo cual la mayoría de la población no se siente muy atraída, simplemente por el hecho de que no se a acercado a ella, y porque no es algo de lo cual se tenga una costumbre, como lo es tener un televisor en casa o una nevera. Hay hogares en donde hay un billete de lotería pero no hay un libro para niños. ¿será que los niños aprenden igual con El Principito, que viendo la telenovela de las nueve? ¿Será que el Chance o el Kino son más llamativos que Las Historia de Tío Tigre y Tío Conejo?
Recuerdo con gracia una vez que fui a la casa de una amiga y su padre en vez de tener libros en la biblioteca tenia cajas, como la simulación de los libros; todavía hoy me pregunto ¿cual era la finalidad de eso?, ¿aparentar algo que no se es?, ¿hacerse pasar por el Sr. intelectual? ¿Y para qué? Opinamos que no hay nada más sabroso que leerse un buen libro, y nada más bonito que leer y releer ese poema que te dedicaron…
Claro, tampoco nada más fastidioso que tener que leerse un libro obligatoriamente. Existe literatura buena. Con frecuencia rechazamos lo que no es de nuestro interés, pero a través de la literatura pueden nacer nuevos intereses.
La literatura transmite todo aquello que se siente y vive pero con palabras; aunque a veces puede no ser bonito, pero eso es, plasmar la vida, los sentimientos, las experiencias en un papel; aprendemos a ser humanos sabiendo lo que viven y sienten otros humanos y sabiendo que somos iguales a ellos en alguna cosa.
Vamos a cerrar leyendo un poema de el poeta palestino Sabih al Qassim que nos prueba una ves mas como la literatura nos enseña a saber que todos somos parte de una misma familia.
ASI
Como se planta una palmera en el desierto
Como mi madre deja un beso sobre mi frente arrugada.
Como mi padre se cubre con su capa
Y revisa con mi hermano la lección de lectura
Como la espiga brota de la tierra
Como sonríe a los enamorados una estrella
Como un soplo que borra la fatiga del rostro del obrero
Como se alza una fábrica entre las nubes
Como cantan algunos amigos un refrán
Como sonríe el extranjero al extranjero
Como retorna el pájaro a su amado nido
Como un niño que lleva sus cuadernos
Como el desierto cuando recibe la lluvia
Así late en mi pecho mi condición de árabe.
Sabih al Qassim.
Corina Durán y Julia Antillano (Ponencia presentada en el 2do Encuentro nacional de poetas liceistas, Mérida 2007

5 feb 2008

Actividades de La Letra Voladora

Los viernes de 3.00 pm a 5.00 pm tenemos el taller de los jóvenes, donde se hacen ejercicios para escribir poemas y cuentos, se lee y escucha teatro, se conversa, comparte, intercambia.
En La Letra Voladora de la Urbanización El Naranjal en Naguanagua, ciudad de Valencia, Estado Carabobo (Avenida 111A, Número 193-19, a tres cuadras de la Plaza).